Por David Santana
El planeta entero se encuentra al borde de una catástrofe sin precedentes. Los recientes enfrentamientos entre Israel e Irán, la intervención directa de Estados Unidos, y la tensión acumulada con potencias como Rusia y China, configuran un tablero explosivo que amenaza con estallar en una Tercera Guerra Mundial.
La chispa del Medio Oriente
Lo que comenzó como un conflicto regional entre Israel e Irán ha escalado a niveles nunca vistos. Misiles, drones y amenazas directas de aniquilación han cruzado fronteras. Y con la presencia militar de Estados Unidos desplegada estratégicamente, la zona se ha convertido en un polvorín global.
Ya no se trata solo del Medio Oriente: la guerra en Ucrania, las provocaciones en el mar de China, y la tensión con Corea del Norte, son señales claras de que el mundo está al borde de un conflicto generalizado.
La ONU: observadora sin poder
En medio de esta tormenta geopolítica, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha demostrado su incapacidad para actuar. Resoluciones sin impacto, reuniones sin resultados, y declaraciones vacías son todo lo que ofrece. No hay liderazgo, no hay fuerza, no hay freno.
La ONU fue creada para preservar la paz tras la Segunda Guerra Mundial, pero hoy, parece solo un espectador más en la cuenta regresiva hacia una tercera.
Todo está conectado
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En Europa: la guerra entre Rusia y Ucrania continúa desangrando al continente.
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En Asia: China y EE.UU. se miran con desconfianza sobre Taiwán.
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En Medio Oriente: la línea entre conflicto y guerra mundial es cada vez más delgada.
El riesgo no es futuro, es ahora. Las alianzas militares se activan, las armas se posicionan, y la humanidad entera está al borde del abismo.
Llamado urgente a la conciencia mundial
Si los líderes mundiales no frenan esta escalada, no habrá ganadores, solo destrucción mutua. Es momento de que las voces sensatas del mundo se levanten. La diplomacia debe imponerse sobre el ego. La paz no es una opción: es la única salida.
Porque si no reaccionamos hoy… mañana puede ser demasiado tarde.
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